A lo largo de la historia del cine, son muchas las películas que han llevado impreso un mensaje relativo al medio ambiente, ya sea sobre la conservación, el cambio climático, la frágil relación del hombre con la naturaleza o la contaminación.
Lógicamente, al igual que ha ocurrido con la sensibilidad de la gente sobre los problemas medioambientales, existe una evolución en los mensajes que ofrece el ‘séptimo arte’. Así, se puede apreciar que conforme el ecologismo ha ido ganando fuerza, los títulos con esta temática han ido aumentando y adquiriendo un mayor carácter crítico.
La primera película que podría decirse que se rueda con el medio ambiente como protagonista es Nanuk, el esquimal, filmada por Robert Flaherty en 1922. El filme trata de mostrar la dura vida del hombre en el clima ártico. Asimismo, en estos primeros pasos destaca La Quimera del Oro, una obra de Chaplin de 1925 en la que a la búsqueda de oro en América se le unen también las dificultades de vivir en un hábitat bastante adverso .
El tema de la relación del ser humano con la naturaleza siempre ha estado bastante presente en el cine, recibiendo en algunos casos un tratamiento negativo, con un hombre que impacta en ella y rompe su equilibrio, alterando incluso la identidad del lugar en el que se desarrolla la acción. Aquí se podrían incluir títulos como Apocalypto (Mel Gibson, 2006); La Mision (Roland Joffé, 1986); Memorias de África (Sydney Pollack, 1985); las adaptaciones del libro de William Golding El señor de las moscas (Peter Brook, 1963; Harry Hook, 1991); o hasta El último mohicano (Michael Mann, 1992) y La delgada línea roja (Terrence Malick, 1999).
En contraposición, se podrían mencionar muchos filmes, como Rapa-Nui (Kevin Reynolds, 1993), Colmillo Blanco (Randall Kleiser, 1991) o El lago azul (Randall Kleiser, 1980), en los que se nos muestra una conviviencia en relativa armonía con el medio ambiente.
A veces, las películas nos llegan a ofrecer complejas reflexiones sobre las diferecias existentes entre la vida en un hábitat natural y otro urbano. Buenos ejemplos de ello son el documental Baraka (Ron Fricke, 1993) o la española La lengua de las mariposas (José Luis Cuerda, 1999).
Otros asuntos muy desarrollados son el de la contaminación y sus consecuencias, como se puede apreciar en Erin Brokowich (Steven Soderberg, 2000) o Gigante (George Stevens, 1956); o el de la tragedia de la extinción animal, como se puede ver en Gorilas en la niebla (Michael Apted, 1988), Instinto (Jon Turteltaub, 1999) o El oso (Jean-Jacques Annaud , 1988), entre otras.
Muy curiosas son también aquellas películas en las que sus ambientaciones se llevan hasta el extremo, como Blade runner (Ridley Scott, 1982), con una tierra hecha un vertedero; la trilogía Mad Max (George Miller, 1979, 1981, 1985), con un árido mundo falto de recursos en el que el agua adquiere un gran valor; o Waterworld (Kevin Reynolds, 1995), con un planeta inundado.
Asimismo, mención especial merece el cine de animación e infantil. Disney siempre ha destacado en este campo con títulos que se han llegado a centrar en temas como la caza, los incendios, el ciclo vital, etc. Muestras de ello son Bambi (David Hand, 1942), Pocahontas (Mike Gabriel y Eric Goldberg, 1995) o El rey león (Rob Minkoff y Roger Allers, 1994). Saliendo de Disney, tenemos la más reciente El lince perdido (Manuel Sicilia y Raúl García, 2008) o la excelente Princesa Mononoke (Hayao Miyazaki, 1997) .
Por último, no nos podemos olvidar tampoco de los documentales, que son quizá los que más han tratado el medio ambiente: al antes mencionado Baraka, se le pueden sumar el espectacular Tierra (Alastair Fothergill y Mark Linfield, 2007) o el impactante Una verdad incómoda (Davis Guggenheim, 2006), que abanderó la causa de Al Gore contra el cambio climático.
Este pequeño repaso, que no pretende ser exhaustivo y que presenta alguna película de dudosa calidad, sólo busca demostrar que el cine es una importante herramienta con un gran potencial para exponer y profundizar en los problemas medioambientales, teniendo una capacidad enorme para educar a los espectadores.
Para ver una lista más extensa: Estudio de la Universidad de Huelva del profesor Martínez- Salanova
Palabras clave: Cine, cultura, medio ambiente urbano, medio ambiente rural, conservación, cambio climático, ciclo vital, calentamiento global, extinción, contaminación.
Foto: Juan Nosé